Mi ex quiere vacunar a mi hijo de Covid y yo no, o incluso al revés; ¿qué sucede si yo quiero vacunarlo y es mi ex quien se opone? Ana Sánchez-Guisande Rubianes, abogada experta en Derecho económico-matrimonial, nos indica qué hacer ante esta complicada situación
Introducción:
Esta cuestión se está planteado cada vez más en los despachos de abogados. Desde que los niños pueden vacunarse contra la Covid, muchos padres se han preocupado por los efectos que la vacuna pueda tener en los pequeños, discrepando sobre la conveniencia de ponerles la vacuna. Como consecuencia de ello no son pocos los casos en que hay posturas discrepantes entre los progenitores respecto a la administración de la vacuna, bien por miedo, dudas, o bien porque alguno prefiere esperar a un poco más adelante, y a veces lo progenitores no consiguen ponerse de acuerdo.
Cuando se trata de un adolescente de 16 años o más años, pueden decir ellos mismos si quieren vacunarse o no, dado que no necesitan ser acompañado de sus padres o tutores, ni tampoco de su consentimiento. De ellos dependerá la decisión sobre la vacuna.
Ana Sánchez-Guisande Rubianes, abogada experta en Derecho económico-matrimonial.
Como toda cuestión relevante que afecte a un hijo, la vacunación, o no, de un menor es una cuestión que entra dentro del ámbito de la patria potestad, consecuentemente es una cuestión, que independientemente de que los padres estén juntos o separados, y de quien tenga la custodia de los hijos, es una decisión que tiene que tomarse conjuntamente por los dos progenitores.
¿Qué pasa cuando uno quiere vacunar a su hijo o hijos y el otro no? o ¿cómo puede solucionarse la discrepancia?
Lo ideal y recomendable siempre es intentar llegar a un consenso entre los progenitores, pero en aquellos casos que las posturas están muy distanciadas y no es posible alcanzar un acuerdo entre las partes, hay que acudir al juzgado para solucionar el problema.
Dicho planteamiento se hará por medio de un procedimiento de jurisdicción voluntaria, solicitando, una de las partes, autorización judicial, efectuándose para ello las alegaciones que se considere oportunas a favor o en contra de la vacunación y pidiendo al juez que le otorgue la capacidad de decisión sobre dicha cuestión, de dicha petición se dará traslado a la otra parte (progenitor) para que conteste, con las alegaciones que considere oportunas al respecto, y previa audiencia de las partes el juez dictará resolución otorgando la capacidad de decisión a uno de los dos progenitores.
Hemos de puntualizar que la mayoría de las resoluciones que hemos conocido, dictadas hasta la fecha por los tribunales, son a favor del progenitor que desea la vacunación. Las resoluciones judiciales se sustentan en el interés superior del menor, priorizando su derecho a la salud y los informes de las autoridades sanitarias, y estos son favorables a la vacunación, al igual que la opinión científica mayoritaria, apuntado a que es una decisión no sólo beneficiosa para el menor sino también para el resto de la sociedad, y que a título individual contribuye a la integración del niño.
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¿Cuáles son las consecuencias de no vacunar a mi hijo de la Covid 19?
El ordenamiento jurídico actual no recoge expresamente la obligación de vacunación, si bien indirectamente todo aboca a ello, de hecho, la regulación contempla la posibilidad de imponer la vacunación incluso por encima de la opinión de los progenitores. Y en supuestos de urgencia o riesgo, incluso los propios profesionales sanitarios podrían adoptar las medidas que sean necesarias para garantizar la salud del menor.
¿Cuáles son las consecuencias si un progenitor vacuna a su hijo sin permiso del otro?
En ese caso se estaría incurriendo claramente en un incumplimiento del ejercicio conjunto de la patria potestad, pues es una decisión que no se puede tomar unilateralmente, tal y como hemos explicado.
¿Qué pasa si mi ex vacuna a mi hijo de la Covid 19 sin mi consentimiento?
Aunque es una decisión que se debe adoptar conjuntamente, la repercusión a efectos prácticos de este tipo de situaciones, resulta muy escasa, y menos de forma aislada, dado la decisión se justifica en el contexto actual y en el hecho de que se ha tomado en beneficio de la salud del menor.
¿Pueden opinar los menores al respecto de su vacunación?
Los menores debe ser oídos en todas las cuestiones que les afecten si son mayores de 12 años o tienen suficiente juicio, consecuentemente podrán ser escuchados en sede judicial, en la práctica muchos menores se inclinan por expresar su deseo de ser vacunados, dado que la mayoría de sus amigos están siendo todos vacunados, y obviamente la presión social y de grupo también les afecta.
¿Y si mi hijo es mayor de 16 años?
Cuando se trata de un adolescente de 16 años o más años, pueden decir ellos mismos si quieren vacunarse o no, dado que no necesitan ser acompañado de sus padres o tutores, ni tampoco de su consentimiento. De ellos dependerá la decisión sobre la vacuna.
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