Los divorcios son un derecho de todas las personas a dejar de compartir su vida con sus pareja. Si la pareja no tiene bienes en común ni hijos, es muy sencillo. Lo ideal en estos casos es acudir al notario. En caso de que haya bienes en común, puede ser más complicado.
La liquidación de la sociedad de gananciales
Este trámite divide el patrimonio común en dos para repartirlo. Es sencillo con el dinero, pero no tan sencillo con una casa, ya que la vivienda no se puede dividir. Lo normal es que uno de los miembros se quede con la vivienda y el otro le compense. A veces también es una opción vender la casa y repartir el dinero.
La custodia de los hijos
Cuando hay hijos menores de edad en común, se regula cómo se relacionarán con sus progenitores. Lo ideal es una custodia compartida, si la situación lo permite. Sino, siempre se puede optar por una custodia exclusiva. A la custodia exclusiva le acompaña un régimen de visitas que permitirá que el progenitor que no vive con los hijos pueda estar con ellos.
La pensión de alimentos.
Es una mensualidad que se paga normalmente con custodia exclusiva. La cantidad depende del número de hijos y del dinero que tenga el que paga. A más nivel de vida, más dinero para los alimentos de sus hijos.
Los gastos extraordinarios
Se excluyen de la pensión de alimentos, va a parte. Son gastos que no son previsibles, y normalmente se pagan al 50%.
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