¿Has alquilado una vivienda y te has encontrado con daños que no eran tu responsabilidad? En este artículo, exploraremos un tema importante para los inquilinos y propietarios por igual: la demanda por daños en vivienda alquilada. Ya sea que estés arrendando una propiedad o la estés ofreciendo en alquiler, comprender tus derechos y opciones en caso de daños es esencial. ¿Qué pasos debes seguir si te enfrentas a esta situación? Descúbrelo a continuación.
¿Qué tipo de daños pueden reclamarse en una vivienda alquilada?
El propietario de una vivienda alquilada puede reclamar al inquilino los daños que causados que sean consecuencia directa de su actuación, por una falta de cuidado, por una falta de mantenimiento o por un mal uso de la vivienda. No son reclamables al inquilino aquellos daños producidos por causas ajenas al mismo, como podrían ser inclemencias meteorológicas o actuaciones de viviendas colindantes. Tampoco son reclamables los desperfectos que sean consecuencia del desgaste ordinario por el transcurso del tiempo.
Veamos algún ejemplo. Si tras permanecer 3 años en el piso, el inquilino restituye la vivienda al propietario con las paredes agujereadas, los marcos de las puertas dañados o con uno de los fogones de la cocina inutilizado, siendo todos los daños consecuencia de su actuación, los mismos pueden ser reclamados al mismo.
Por el contrario, si al finalizar el contrato de arrendamiento, el propietario constata que ha aparecido una humedad y una grieta en la pared del baño, y al avisar el técnico, resulta que el daño trae causa en la tubería general del edificio, el mismo no sería reclamable al inquilino por no guardar relación directa con el daño acaecido.
¿Cómo tengo que demostrar los daños en la vivienda?
Para demostrar los daños en la vivienda es conveniente que en el momento de firmar el contrato de arrendamiento se haga un inventario inicial del estado general de la vivienda junto con los muebles y electrodomésticos y se documente dicho estado con fotografías. De este modo, podemos dejar constancia expresa de la situación inicial en que se hallaba la vivienda arrendada al momento de iniciar el contrato.
A partir de aquí, cualquier daño reclamable que se haya producido en la vivienda podrá demostrarse con una fotografía actual por contraste con la fotografía contenida en el inventario inicial. Además, será indispensable, contar con un informe técnico que determine la causa del daño y un presupuesto de reparación.
¿Cómo poner una demanda por daños en una vivienda alquilada?
Para poner una demanda por daños en una vivienda alquilada cabe acudir a un abogado, quién estudiará la viabilidad de la pretensión y solicitará la documentación necesaria para probar la responsabilidad del inquilino, así como para cuantificar la reclamación.
La reclamación de daños en una vivienda alquilada se tramita por la vía del procedimiento ordinario. Por consiguiente, el procedimiento inicia con la demanda y la contestación a la demanda, continúa con el acto de la Audiencia Previa y el juicio y finaliza con la sentencia de primera instancia. Finalmente, la sentencia puede recurrirse a una segunda instancia.
Modelo de carta de reclamación de daños en una vivienda
Apreciado inquilino,
Te contacto en relación al contrato de arrendamiento sobre la vivienda sita en la Calle “x” que convenimos el pasado día “x”. Tras recuperar la posesión de la vivienda he constatado la aparición de diferentes daños que seguidamente paso a referir:
Los daños relacionados traen causa directa de tu permanencia en la vivienda y ascienden a la cantidad total de “x”, según presupuesto de reparación que adjunto a la presente carta.
Por todo ello, te requiero para que procedas al pago de la cantidad “x”. De lo contrario, acudiré a un abogado para proceder a la reclamación judicial de dicho importe. Atentamente,
¿De cuánto es la indemnización por daños en una vivienda alquilada?
La indemnización por daños a una vivienda alquilada será por el mismo importe al que ascienda la reparación de los daños causados. Según se ha explicitado, para poder reclamar los daños es necesario aportar el presupuesto de reparación de dichos daños.